Desde hace 8 años que no tengo pareja, actualmente tengo 33 años, antes de eso había sido rechazado en cada una de las oportunidades. Al tener una relación con una chica con la que no me porté bien decidí ya no insistir ni tampoco aceptar algo de lo que no estuviera convencido para no dañar o quitar oportunidades sobre todo a ella. Junto a ello también sucedió que profesionalmente me empezó a ir muy bien con lo que ocurrieron dos cosas, la primera es que mi autoestima mejoró mucho a tal punto que me dije a mi mismo que ya no valía la pena estar suplicando a mujeres para que estuvieran conmigo, con los beneficios económicos que obtenía podría darme el lujo de obtener la compañia del nivel que quisiera y cuando lo quisiera, si es que saben a lo que me refiero, francamente no me arrepiento de ello y debo reconocer que fueron buenos momentos.
Sin embargo la parte sentimental aún seguía anclada, y mi costumbre de ponerme retos inalcanzables para justificar mi fracaso hizo que aparte de que me gustaran debían tener 2 requisitos, primero debían de ser entre 5 a 10 años menor que yo y por lo menos estar graduadas de la universidad como yo, pero no cualquier carrera, tenía una lista específica de carreras con las que no me relacionaría en lo más mínimo, o al menos de manera sería. Pensé que eso haría que ninguna mujer apareciera porque tantos requisitos que hacían una búsqueda imposible.
Pero aparecieron dos chicas, una psicologa industrial 26 años y una arquitecta 30 años. Si me lo preguntan preferí a la psicologa, por lo que me empeñé en obtener su atención, nos hemos visto una sola vez, sin embargo no logré obtener su interés en ese momento, en otras circunstancias hubiese desistido, pero mi determinación hizo que siguiera insistiendo y tratando de llegar con detalles y conversaciones, lamentablemente no personales debido a las restricciones por la pandemia actual lo que limita las relaciones humanas con quienes no forman parte de la "burbuja social", ya llevabamos 3 meses de interacción, ella es admiradora de la luna y el día de su cumpleaños hace justo 3 meses hizo que yo le diera un presente alusivo a la luna, a partir de ahí ya fue más receptiva, las conversaciones eran de mediana duración de 1 a 2 horas, por lo que hace una semana intenté llegar un paso más adelante y hacerle saber de mis verdaderas intenciones que no eran quedar como amigo sino lograr tener una relación con ella. En otros tiempos ahí se hubiera acabado todo, sin embargo no cortó comunicación, pero no obtuve respuesta, ya que el manifiesto fue escrito, habíamos seguido interactuando sin tocar el tema. Hace unos días dí otra luz cuando le envié la canción I Want to hold your hand de los Beattles, creo que más explícito imposible. Normalmente las interacciones son por Whatsapp y nunca dejaba mis mensajes en visto, sino que aunque lo "ignoraba" posteriormente me contestaba lo cual me daba a suponer que no quería dejarme en visto sino que tenía la intención, aunque no tuviera tiempo en ese instante, de contestarme. Sin embargo después de este mensaje no me contestó. Creo que talvez está distanciandose de a poco, no queriendo cortar la comunicación de golpe sino alejandose de forma discreta. No sé si darme por vencido y asumir una derrota más o insistir. Francamente me da miedo el rechazo, talvez por eso yo también evado el tema, y estoy casi seguro que así será.
La arquitecta está más receptiva pero no estoy tan interesado en ella y tampoco quiero que se ilusione para evitar provocarle problemas, talvez lo mismo le pase a la psicologa conmigo, no dar alas para no dar motivos imaginarios.
Un saludo.